Hemos desarrollado la estructura en numerosos proyectos hospitalarios. Cada vez más, las actuaciones suelen estar orientadas a la ampliación en superficie de un centro existente a la vez que la rehabilitación de la estructura existente (Hospital de La Paz, Hospital de León, Hospital de La Zarzuela...).
La rehabilitación es, por lo general, muy complicada, debido a la necesidad de mantener en funcionamiento el complejo hospitalario existente, lo que suele implicar la actuación por fases, viendo en cada caso si la estructura real coincide con la información previa disponible. Un claro ejemplo de esto es la cantidad de problemas aparecidos en la ejecución de la enorme ampliación del hospital de León, en la que a cada paso realizado es necesario replantearse alguna solución estructural, porque lo inicialmente previsto no coincide con lo realmente ejecutado y que se va descubriendo según se van desalojando zonas del hospital para poder trabajar.
Los nuevos centros que no requieren rehabilitación, suelen estar marcados por ajustados plazos de ejecución, que hace que el desarrollo de la ejecución de los mismos sea siempre complejo. Además, el gran tamaño de los mismos suele llevar asociados otro tipo de problemática, en forma de coordinación de tajos, plazos, aperturas parciales de edificios, etc.
Por su enorme complejidad, hemos decidido no incluir en este post nada relacionado con el Nuevo Hospital de Toledo, que tiene sus propias entradas y que generará infinidad de artículos, por lo que os animamos a visitar este apartado de nuestro blog. Lo mismo podemos decir del otro enorme proyecto hospitalario del Nuevo Hospital de Son Espases, que con sus 350.000 m2 se convierte en una de las obras que más experiencia nos ha aportado, junto con el de Toledo (500.000 m2)